En esta sección vas a descubrir algunos de los platos más importantes de la comida colombiana. Un recorrido por la cocina y tradiciones de este enorme país latinoamericano.
Contenidos
- 1 ¿Cuáles son los principales platos típicos de Colombia?
- 2 Empanadas
- 3 Tamales
- 4 Arroz con Coco
- 5 Bandeja Paisa
- 6 Sancocho
- 7 Ajiaco
- 8 Lechona
- 9 Arepas
- 10 Patacón
- 11 Hogao
- 12 Ternera a la Llanera
- 13 Caldo de Costilla
- 14 Hormigas Culonas
- 15 Sacha Inchi o Maní Amazónico
- 16 Café
- 17 Sabajón
- 18 Friche
- 19 Locro
- 20 Cocido de Subachoque
- 21 Chanfaina de cerdo
- 22 Sango
- 23 Sungo
- 24 Gamitana
- 25 Frutas y verduras típicas de Colombia
¿Cuáles son los principales platos típicos de Colombia?
La cantidad de platos típicos de Colombia es bastante grande. Cada región o departamento cuenta con varios guisos que le representan culinariamente.
Dicho esto, tampoco es difícil hacer una lista con los platos más destacados de Colombia. Esas recetas que traspasan fronteras y son cocinadas en restaurantes típicos colombianos fuera del país.
A continuación te vamos a dejar una lista con algunos de los que creemos que son los platos que tienes que probar o «must-try dishes» si vas a visitar Colombia.
- Empanadas
- Tamales
- Arroz con coco
- Bandeja Paisa
- Sancocho
- Ajiaco
- Lechona
La mayoría de estos platos son carnívoros, aunque algunos sancochos o el obligado arroz con coco costeño suelen elaborarse o acompañarse de pescado.
Este TOP 7 de los mejores platos puede dar cabida a algunos platos más como las arepas, el patacón y el hogao.
Vamos a hablar de estos y otros platos típicos de la gastronomía colombiana a continuación.
Empanadas
El maravilloso mundo de las empanadas es casi inabarcable y muy adictivo. Se ven por todos lados, bares, restaurantes, puestos de street food, etc y son de lo más tentador. Muchas regiones tienen sus propias especialidades, así que intenta probarlas todas 🙂

Y recuerda, una empanada calentita y recién hecha, vale por dos 😉
Una empanada suele rondar entre los 1.000 y los 2.000 COP, dependiendo del tamaño y del tipo de relleno de la misma.
Tamales
Aunque de origen mexicano, en Colombia gozan de gran popularidad. Con diferentes tipos de rellenos y envolturas, existen incontables formas de prepararlos.

En Colombia los tamales más típicos son los de Tolima, envueltos en hoja de plátano y rellenos de arroz, arveja, maíz, unos trozos de tocino y cerdo y una pieza de pollo.
Los tamales suelen costar entre los 5.000 y los 10.000 COP, dependiendo de la harina y el relleno empleado en el mismo.
Arroz con Coco
El arroz con coco es un plato que vas a encontrar en prácticamente cualquier mesa de las costas Pacífico y Caribe de Colombia.
Una comida colombiana a la orden del día, sencilla, sabrosa y muy nutritiva que suele acompañarse de un trozo de carne, pescado o verduras. Lo más normal es encontrarlo servido junto a una pieza de carne asada o pescado frito y una pequeña guarnición de ensalada.
El arroz con coco es un plato contundente y llenador, que junto a la carne o el pescado, la ensalada y el zumo o jugo de frutas es sin duda otro de los platos más típicos del país.
Un plato de arroz con coco y mojarra frita puede costar alrededor de los 10.000 COP.
Bandeja Paisa
Este clásico de las cocinas paisas (zona que comprende Antioquia, Caldas y parte del Valle del Cauca entre otras) es otro de los clásicos de la comida colombiana que no te debes perder.
Al igual que el arroz con coco y su consiguiente guarnición, la bandeja paisa es un plato único, saciante, muy nutritivo y realmente sabroso si eres amante de las legumbres, los huevos y la carne.
La bandeja paisa viene en un plato con arroz, aguacate, carne picada, chicharrones de carne de cerdo, huevos fritos, salchichas, patacones, alubia roja o frijoles y arepas.
Dependiendo de la zona en la que te encuentres puede que la bandeja paisa sufra algunas variaciones en sus ingredientes.
Una buena bandeja paisa puede costar entre 10.000 y 15.000 COP.
Sancocho
Un sancocho es un guiso caldoso cocinado a fuego lento. Normalmente se emplean grandes piezas de carne, pollo o pescado, combinadas con legumbres y verduras que se dejan cocinar durante horas. Una sopa reconfortante, muy nutritiva e ideal para recuperar fuerzas después de una gran caminata.
La variedad de sancochos es muy grande, así que no tendrás problema en encontrarlo en más de un restaurante o puesto de comida.
Ajiaco
Aunque el ajiaco es un plato propio de Bogotá, le hemos hecho un hueco en esta lista, ya que se trata de uno de los platos más importantes de la gastronomía colombiana.

Este guiso a fuego lento elaborado con pollo, maíz, patatas y especias se acompaña de arroz y aguacate y es otro de esos platos llenapanzas propios de Colombia.
Probablemente encuentres los mejores ajiacos en alguno de los restaurantes cercanos a la plaza Bolívar de Bogotá.
Un ajiaco santafereño completo ronda los 10.000 a 15.000 COP.
Lechona
La lechona es un plato muy típico de la región colombiana del Tolima. Se trata de una pieza de cerdo completa que se rellena con su propia carne, arvejas, arroz y especias.
Este calórico y sabroso plato se puede encontrar en muchos puestos callejeros del país y si está bien elaborado, es un auténtico manjar.
Acompáñalo de una cerveza bien fría y ya tienes un tentempié 100% colombiano 🙂
Un platito de lechona suele costar entre los 2.000 a 5.000 COP.
Arepas
Las arepas son otro clásico de los puestos de comida callejera del país. Esta especie de panecillos gruesos y redondos elaborados a base de harina de maíz son uno de los pilares del día a día culinario de Colombia.

Además de las arepas a base de harina de maíz, agua y sal también se pueden encontrar arepas rellenas de queso, carne o legumbres.
Si viajas a Cartagena de Indias, no te olvides de probar las arepas rellenas de huevo. Un auténtico placer culinario, sobre todo cuando están recién hechas.
El precio de las arepas depende mucho de los ingredientes empleados. Entre los 2.000 a los 3.000 COP puedes encontrar una buena arepa.
Patacón
El patacón o tostón es otro plato muy típico de la gastronomía colombiana. Una banana verde que se fríe dos veces en aceite, aplastándola antes de la segunda fritura para que tome su peculiar forma y se cocine completamente.
Al igual que las arepas, los patacones suelen servir de acompañamiento a infinidad de platos y menús del día, entre ellos la bandeja paisa o el arroz con coco.
Hogao
Esta sencilla salsa elaborada con cebolla, tomate natural y especias es el compañero ideal de unos patacones recién hechos. Los colombianos están muy orgullosos de esta salsa, y lo cierto es que combina muy bien con muchos de sus platos más típicos como las empanadas, las arepas o la bandeja paisa.
Ternera a la Llanera
La ternera llanera o mamona es todo un espectáculo tanto para el ojo como para el paladar. En su preparación se utilizan diferentes cortes de ternera.

Una de las características más curiosas es que en algunos lugares las piezas suelen condimentarse con chicha o cerveza y su asado en lento y constante hasta quedar tierno y jugoso.
Un plato de ternera a la llanera puede rondar entre los 10.000 a los 15.000 COP dependiendo de los cortes empleados.
Caldo de Costilla
El caldo de costilla es un clásico de los desayunos en Bogotá y otras regiones de Cundinamarca y Boyacá.
Básicamente se trata de una sopa a fuego lento elaborada con costillas de ternera, patatas, cebolla y cilantro, que sienta a las mil maravillas si estás buscando un desayuno calentito y rico en proteínas.
Un plato de caldo de costilla en Bogotá puede costar unos 5.000 COP.
Hormigas Culonas
Las hormigas culonas son uno de los platos más típicos de las gastronomía santandereana. Estos enormes insectos, también conocidos como hormigas arrieras, aparecen entre los meses de abril y mayo, en días soleados precedidos de abundantes lluvias.

El proceso de recogida es largo, ya que solo se comen las hembras y éstas deben de ser despojadas de sus alas, cabeza y patas antes de consumirlas. Después se remojan durante un día en agua con sal para finalmente ser tostadas en un recipiente de barro. El plato es una de las exquisiteces más valoradas de la región.
Las hormigas en la cultura Guane
La tradición de comer hormigas se remonta a la cultura Guane, que ocupó gran parte del actual territorio de Santander. Curiosamente este es la única región que se ha ocupado durante siglos a la recogida y consumo de culonas.
Algunas teorías plantean que los Guanes únicamente se limitaron a ocupar el territorio habitado por estos himenópteros, mientras que otras aseguran que poblaron de hormigas los territorios en los que habitaban.
En cualquier caso, esta cultura veneró de tal manera el consumo de estos insectos que incluso creaban ungüentos y cataplasmas con fines curativos.
Otros tipos de hormigas
Dejando a un lado la variedad Atta, en Colombia también se comen hormigas de una especie nativa de los Llanos Orientales y de una variedad de hormiga nocturna que se encuentra en algunos montes del país, aunque los entendidos dicen que carecen del sabor y de las propiedades de las santandereanas.
Tal es la notoriedad de las culonas de Santander que han conseguido cruzar fronteras y actualmente se exportan a Estados Unidos y a países europeos como Alemania.
Degustación
Las culonas son un plato realmente singular, de sabores complejos y aspecto poco apetecible.
Después de probarlas varias veces podemos decir que es muy importante que conserven su frescura natural. Una hormiga culona tostada hace tiempo, empaquetada durante meses, no conserva los sabores y aromas igual que una recién recogida.
Como cualquier otro tentempié de insecto, y después de probar saltamontes, escorpiones y otras delicatessen, podemos afirmar que la textura y sabor son parecidos a los de un fruto seco normal y corriente, en el que se aprecia su sabor salado y gusto crocante pero no sus vísceras.
En cuanto a sus propiedades nutricionales, además de ser conocidas como un popular afrodisíaco natural, estas hormigas gigantes son ricas en proteínas y ácidos grasos no saturados.
Sacha Inchi o Maní Amazónico
El sacha inchi o maní amazónico es una especie de fruto seco rico en nutrientes muy popular en la región del Amazonas.
Origen
Aunque de origen peruano, puede encontrarse en casi todo el territorio andino. Lo puedes encontrar en cualquier herbolario o supermercado de la ciudad de Mocoa, una de las regiones de mayor producción.
Un envase de unos 150 gramos ronda los 6.000 COP.
Propiedades
La plukenetia volubilis es una planta con frutos en forma de estrella (parecida al anís estrellado), compuesta por 6 protuberancias que envuelven las semillas, de un tamaño aproximado de 1 cm. de diámetro.
Estas semillas comestibles son ricas en proteínas y bastante fáciles de digerir, destacando por su alto contenido en omegas 3-6-9, antioxidantes y vitaminas E y A. Además son muy ricas en ácidos grasos insaturados, clave para mantener regulados los niveles de colesterol en sangre, prevenir problemas cardíacos y disminuir la tasa de triglicéridos.

El sacha inchi es el tentempié ideal para aportar energía y combatir el cansancio. El sabor oleaginoso e intenso del “maní de los Incas” engancha y además es una buena inversión para tu salud. Recuerda que es una de las semillas vegetales con mayor cantidad de omegas del mundo.
Bebidas
Como no todo en la gastronomía colombiana es comer, te dejamos con algunas bebidas que debes probar sí o sí en tu visita a Colombia. La primera y más importante es el café.
Café
Como probablemente ya sepas, Colombia es líder mundial en la producción de café junto a Brasil y Vietnam.
Este hecho no quiere decir nada en cuanto a la calidad del café que seguramente vayas a tomar en Colombia, ya que el mejor grano suele ser exportado a Norteamérica y Europa.
No esperes encontrar buen café a precios de risa.
A no ser que vayas directamente al eje cafetero y adquieras un poco del mejor café de finca, lo que está a la orden del día en ciudades como Bogotá, Medellín, Cali o Cartagena es una café de calidad media, incluso instantáneo. La otra opción es visitar las tiendas-café Juan Valdez, una especie de Starbucks a la colombiana, o la cadena Oma.

Si te das un paseo por cualquier supermercado, la decepción va a ser aún mayor. Mucho Nescafé y poco café en grano a buen precio.
En conclusión, el café ofrecido al consumidor colombiano no es habitualmente el mejor de la producción, sino que los mejores se destinan exclusivamente a la exportación, quedándose en el país para el consumo interno las calidades inferiores. Gran decepción.
Tinto y Perico
El tinto es como en Colombia se le llama al café solo, mientras que el perico (también llamado pintado) es un café solo al que se le añade un chorrito de leche.

Tintos y pericos deben ser tomados en tacita pequeña, normalmente servidos en un pequeño vaso de plástico. Su precio ronda los 500 COP (unos 0,20€), aunque todo depende de la ciudad y el barrio en el que te encuentres.
El guarulo es una sabrosa mezcla de café y agua de panela (jugo de caña de azúcar solidificado), al que se le pueden añadir pequeños bastoncitos de canela.
El carajillo es una mezcla de café y ron (aunque sirve cualquier alcohol fuerte), y fue la manera de las tropas españolas de llenarse de coraje ante una batalla (empezó llamándose corajillo y acabó derivando a carajillo).
Sabajón
El sabajón es una bebida alcohólica de graduación media muy típica durante la época de Navidad.

Está elaborada con aguardiente, leche, huevos y un montón de azúcar y se podría decir que es una especie de Baileys o crema de whisky a la colombiana 😉
Algunos de los platos menos conocidos de la gastronomía colombiana
En esta sección te presentamos rápidamente algunos platos de la gastronomía colombiana menos conocidos y populares pero no por ello menos importantes.
Friche
Un rico guiso elaborado a base de carne de cabrito. La carne de este animal se cocina durante varias horas para darle esa textura y jugosidad tan característica al plato. Este plato es muy típico de la gastronomía de La Guajira y los aborígenes Wayuu o Wayú.
Locro
El locro es uno de los platos más típicos del departamento de Nariño colombiano. Se trata de una especie de sopa a base de varios tipos de patatas, leche, hogao y huevos a la que finalmente se le agrega un pedazo de queso blanco y un huevo crudo.
Un plato vigorizante, contundente y considerado hermano del cuchuco cundiboyacense. Otras sopas características de esta región son la juanesca y el pusandao.
Cocido de Subachoque
Este es un plato originario del municipio cundinamarqués de Subachoque. Una auténtica bomba a base de murillo (una parte de la ternera), cerdo, costillas, chorizo, papas, maíz, habas y arvejas.
Chanfaina de cerdo
Toda una colección de vísceras, entresijos y demás menudencias del cerdo fritas con ajo y acompañadas de especias y jugo de limón. Una especie de picada tradicional a base de las entrañas de este animal.
Sango
Este plato originario del Valle del Cauca está compuesto por maíz, patatas, repollo, guisantes, yuca y especias. El toque especial lo aporta la naranja agria y el birimbí, una bebida especiada a base de maíz, panela, clavo y canela. No confundir con el sango de verde, un guiso tradicional ecuatoriano a base de plátano verde y pescado.
Sungo
El sungo son las vísceras del cuy, un pequeño roedor muy apreciado en la gastronomía andina. En Nariño suelen asarse y acompañarse de maíz frito. Para los indígenas de esta región, el sungo tiene propiedades afrodisíacas.
Gamitana
La gamitana es un pescado de origen amazónico muy apreciado entre los locales, que consideran a su carne como una de las más sabrosas.
El pez es nativo de las cuencas de los ríos Orinoco y Amazonas y suele prepararse frito, relleno, guisado o en mazamorra. Muchas comunidades indígenas utilizan la grasa de este pescado para freír y sus huevas son consideradas como un auténtico manjar amazónico, una especie de caviar oriundo del Amazonas.
Frutas y verduras típicas de Colombia
Colombia tiene una gran variedad de frutos exóticos de los que merece la pena hablar. En esta sección te vamos a presentar algunas de las menos conocidas y más recomendables.
Balú o Chachafruto
El balú o chachafruto es un árbol nativo de la región andina que ha sido clave en la alimentación indígena durante los periodos de malas cosechas y escasez de alimentos. Se trata de una especie de vaina alargada parecida a una enorme habichuela o judía verde.

Este tipo de árboles “Erythrina edulis” se cultivan cerca de las plantaciones de café para darle sombra a los cafetales y proteger su suelo.
Su alto contenido en vitaminas lo convierte en una superfruta. Además, sus proteínas son de mayor calidad que las de otras legumbres, por lo que es altamente recomendable en dietas vegetarianas.
En gastronomía se utiliza para hacer dulces, mermeladas y conservas. Normalmente se emplean las enormes semillas que tiene dentro de las vainas. Se pueden pelar y freír en aceite bien caliente, cocerlas o incluso hacer arepas con su harina.
Uchuvas
En Europa son más conocidas como physalis y son una de esas frutas exóticas caras y complicadas de encontrar. En Colombia es todo lo contrario.

Hay incontables maneras de prepararla y se ha convertido en un producto de experimentación entre los grandes cocineros. Es curioso que para ser una fruta tiene un alto contenido en fósforo y proteínas, además de las más lógicas vitaminas A y C.
Corozo
El corozo es un fruto muy extendido en diversos lugares del país y aunque no tiene gran cosa que comer, es todo un “pasatiempo” culinario en Colombia.

Su jugo es uno de los grandes clásicos de la gastronomía colombiana. Los frutos se hierven en agua para extraer la esencia y para separarlos de piel y semillas. De éstas se extrae aceite para hacer jabón.
Mamey
El mamey, también conocido como mamey de Cartagena de Indias, procede de un árbol similar a la magnolia y es de amplio cultivo en áreas tropicales. Se suele consumir como fruta fresca, en zumos o incluso en conservas.

Como curiosidad, las semillas pulverizadas se usan como insecticida.
Zapotilla
La zapotilla o sapodilla es de la misma familia que el mamey y el caqui o persimón español. Para nuestro gusto de sabor no muy agradable, nos pareció una extraña mezcla dulce y terrosa, con toques… mejor probarlo. En los mercados colombianos suelen llamarlo níspero.

Pitaya o pitahaya
Comúnmente conocida como dragon fruit en los países asiáticos, en Colombia esta refrescante y algo costosa delicia se vende en su variedad amarilla, mientras que en los países asiáticos se suele consumir la variedad rosada, de mayor tamaño y afortunadamente mucho más económica.

Ñame
El ñame es un tubérculo comestible que podría equivaler en sabor y usos culinarios al taro asiático. Este producto se utiliza en sopas y guisos y es muy popular en la cultura gastronómica colombiana.

Guanábana
De sabor muy dulce y cierto parecido con la chirimoya pero de mayor tamaño. Su jugo es todo un clásico caribeño.

Noni
El noni o citrofolia es muy conocido por sus gran variedad de propiedades beneficiosas (fibra, proteínas, hierro, vitamina C, calcio, zinc) y por su sabor amargo. Gran parte de este fruto se comercializa en cápsulas, tabletas o té.

Maracuyá
Una de las frutas tropicales más deliciosas y asequibles, en Colombia se suele encontrar la variedad amarilla, más grande en tamaño y mucho más ácida que la variedad morada. En Bogotá se puede conseguir el segundo tipo de maracuyá, pero a un mayor precio.

Arracacha
La arracacha o apio criollo pertenece a la misma familia que la zanahoria y el apio. Es rico en calcio y vitamina A y se utiliza en gran variedad de platos como ñoquis, pasteles, empanadas, tortas, etc.

Guatila o chayote
También llamada “papa del pobre” es un producto altamente beneficioso para la salud. Se suele consumir tanto en zumos como en purés o sopas.

Nopal
Muy apreciado en México, los nopalitos son un clásico de la cocina mexicana. En España se conocen únicamente los higos chumbos, que son los frutos que brotan del nopal. Se toma en jugos, salsas, sopas o tortillas.

Tomate de árbol
El tomate árbol en sus variedades roja, amarilla y común es una de las frutas más populares de los mercados colombianos.

Hasta aquí algunos de los frutos más populares de la cultura de Colombia. Hay muchos más, que probablemente descubras al visitar alguno de sus supermercados o mercados de abastos.
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